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Abastecimiento de Agua

El suministro de agua ha sido siempre un problema. Lanzarote y Fuerteventura, tiene la más alta tasa de evaporación, el porcentaje más bajo de las aguas superficiales y las más bajas aguas subterráneas de reposición en las Islas Canarias.

En el pasado se han recogido las precipitaciones en grandes aljibes. Por el alumbramiento de los túneles de agua en el macizo de Famara, se podía cubrir en 1950 todavía el 25 por ciento de la demanda. De los siete túneles que se encontraron en aquella época sólo se utilizaron cuatro y en la actualidad sólo uno, ya que la caída de aguas subterráneas ha llevado a la salinización por avanzar agua del mar (valores máximos de 1 g de NaCl).

La necesidad de agua explotó en los años 50 por el turismo. Con tanques de agua transportaron el agua de Gran Canaria y Tenerife a Lanzarote.

1964 al este de Arrecife fue puesto en funcionamiento la planta de desalinización de agua de mar con una enorme energía, desde entonces ha tenido que ser ampliado constantemente y ahora cubre 90 por ciento de las necesidades de agua.

Al fin de los años 70 fue construida la Presa de Mala en el barranco del Palomo para un volumen de 168.000 m3. Después de las fuertes lluvias inusuales a finales de 1989 la presa estuvo llena un corto período de tiempo con 40.000 m3 de agua. La vista de la presa con el agua fue única pero la presa sin agua por otra parte, sigue siendo común.

Los nativos, los guanches con su cultura de la Edad de Piedra fueron dependiente de agua del cielo sólo, pero los Lanzaroteños de hoy son dependiente de las importaciones de petróleo 100 por ciento.